EMBILIPITIYA – UNAWATUNA

Unos días de relax en las playas de Sri Lanka

Sri Lanka es una Isla, y por consiguiente tiene una enorme costa. Muchísimos son los puntos de la playa para visitar. Una de las dudas que nos surgió desde el principio de preparar el viaje, era que zona visitar. Desechando el norte, que nos queda bastante a desmano, decidimos descartar el este ya que hemos leído, que en la época que estamos suele aparecer el monzón. Así que las opciones se reducían algo, pero todavía seguían siendo amplias. Desde Mirissa hasta Colombo, hay una costa repleta de lugares para disfrutar de unos días de buenas playas. Habíamos mirado mucho, y no nos convencían unas más que otras, ya que nos gustaban todas. Todavía sin tenerlo muy claro el día de hoy, improvisaríamos un poco, hasta ver donde teníamos mejor combinación de buses. Así que nos levantamos y antes de marchar de Embilipitiya, salimos a dar una vuelta.

Pasamos por una Bakery, típicas en toda Sri Lanka, que son pastelerías, bollerías, donde hacen dulces recién horneados. El olor de los deliciosos bollos que estaban sacando del horno, hicieron que nos entraran, ganas de comprarlos. Entramos y nos compramos por unos 2,5€ tres bollos y un enorme bizcocho relleno, para comer a lo largo del día. Y ya de paso, comemos alguna cosa allí mismo.

Nos entretenemos un poco por la ciudad, y decidimos marchar para llegar lo más temprano posible a la playa. Nos da pena abandonar la auténtica Sri Lanka, aunque por otro lado, tenemos ganas de relajarnos en la playa. Vamos a por las mochilas, y nos dirigimos a la estación de autobuses que se encuentra a unos 100 metros de nuestro hotel.

Llegamos y preguntamos por autobuses a la zona de Galle. Nos dicen que no hay directos, que hay que ir a Matara, y allí cambiar de bus. Buscamos el bus de Matara en la enorme y concurrida estación de autobuses de Embilipitiya. Está llena de autobuses de un lado a otro. Tenemos que ir al fondo, sorteando los buses que entran y salen, hasta que conseguimos llegar al nuestro. Por fin cogemos un bus sentados desde el principio, y menos mal porque el trayecto dura unas dos horas y media. Y tan solo hay unos 80 Kilómetros. Seguimos sin entender como tardan tanto. Empezamos a pensar que aquí los kilómetros son más largos. Aunque no nos molesta ir tanto tiempo en el bus, ya que vamos pasando continuamente por pueblos pequeños, y se nos hace de lo más ameno.

Poco antes de llegar a Matara, empezamos a oler el característico olor que tiene el mar. Nos ponemos como locos, ya que nosotros vivimos en un lugar en el que no hay mar, y cada vez que lo vemos, lo valoramos mucho. Y en poco tiempo el mar empieza a aparecer.

Así estamos unos cuantos kilómetros, hasta llegar a un punto donde se deja ver del todo. Un mar verdoso, cristalino, con arena marrón, con mucho oleaje. Esta imagen, es la que hemos visto en internet, en la mayoría de las playas de Sri Lanka.

También pudimos ver en algún punto del recorrido a los famosos pescadores zancudos. Algo que tenemos ganas de sacar fotografías, ya que las hemos visto, y es muy típico de Sri Lanka.

Llegamos a Matara, una ciudad costera, donde podemos ver un reloj inglés, recuerdo de la colonización inglesa. Cambiamos de autobús, y como siempre, está esperándonos. Estamos a 45 Kilómetros de Galle, y nos vamos a parar en Unawatuna, que se encuentra muy cerquita de Galle, pero nos parece más tranquila. El trayecto de una hora, nos deja imágenes de playas preciosas.

Tenemos ganas de llegar a nuestro destino, para ver si también es tan bonito. Llegamos y el hotel que hemos mirado, se encuentra a 500 metros, pero hoy estamos un poco vagos, y deseosos de llegar cuanto antes, y cogemos un tuk tuk. Llegamos al Hotel SurCity Gueshouse, nos enseñan las habitaciones, y nos parece bien. La habitación es un poco sencilla, sobre todo el baño algo antiguo, pero por unos 20€, no se puede pedir más. Además nos entra el desayuno.

Dejamos rápidamente el equipaje, y nos ponemos el bañador. Estamos ansiosos por descubrir si está fría o caliente el agua. Y vamos directos a bañarnos. La playa es prácticamente como las que hemos visto por el camino. Son totalmente distintas a las del Caribe, de arena blanca y fina, pero también son bastante atractivas. Nos metemos al agua, y aunque parece estar un poco fría al principio, está bastante buena. No está excesivamente caliente, pero te puedes dar un largo baño. Hay mucho oleaje. Las olas no son muy altas, pero tienen una fuerza, como nunca antes habíamos visto. Incluso si paseas por la orilla, y te viene una ola, te puede tirar al suelo. La playa de Unawatuna tiene más de un kilómetro para pasear, donde acaba en el Templo Devol Devalaya.

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El Templo Devol Devalaya no es el templo más bonito que hemos visto, pero tiene un Buda y una Pagoda en lo alto, que con el mar de fondo, se hace atractivo.

Subimos a verlo, y detrás del Buda, hay un paisaje con un acantilado, y el mar de fondo, bastante chulo. Recuerda que tienes que vestir adecuadamente para entrar.

La imagen de Sri Lanka podría ser perfectamente, las recolectoras de las plantaciones de té, o los pescadores zancudos. Estas dos imágenes se han convertido en un icono del país. Tenemos muchas ganas de fotografiar los pescadores, pero hemos leído, que más que pescadores, son actores. No es algo que hagamos habitualmente, ni que nos guste, pero en esta ocasión vamos a hacer una excepción. Hablamos con un hombre de un tuk tuk, para preguntarle que si nos puede llevar a verlos, y nos dice que sin problema. A unos 11 Kilómetros por la carretera a Mirissa, nos lleva el tuk tuk. Tienen hasta un cartel anunciándose. Nos para el tuk tuk, y viene un hombre, y nos pregunta que si queremos ver a los pescadores. Le preguntamos qué cuanto nos va a costar. Nos dice que 10€, y que son 5 pescadores. Era el precio que habíamos leído que había que pagar si los querías ver, y aceptamos, ya que de otra manera no los vas a ver. Es la primera vez que pagamos para hacer una fotografía, ya que todas las que hemos tomado son sin ningún tipo de posados, ni por supuesto pagadas. Salen cinco hombres de una cabaña, comienzan a preparar cañas, gorros, etc, y se van subiendo a los palos.

La verdad, es que es algo incomodo, porque es todo muy artificial, pero nos hacía mucha ilusión tener esta fotografía. Hacemos muchísimas fotos, hasta que nos cansamos, y ya nos dicen que si hemos acabado. Así todo dos de ellos, han pescado algún pez. Debe ser que son pescadores, que ahora les da más dinero posar para los turistas, que pescar.

Con las fotos tomadas, regresamos a Udawatuna, ya anocheciendo. Antes de llegar a nuestro hotel, vemos que empieza la playa de Udawatuna, le decimos al hombre del tuk tuk, que si esa playa va a dar a nuestro hotel. Nos responde que si, y le decimos que nos deje allí. Así vamos andando, viendo un anochecer precioso, con el mar de fondo.

Llegamos a nuestro hotel, y nos quedamos en el restaurante Black And White, que es el restaurante del Hotel SurCity Gueshouse, en el que estamos alojados. No nos complicamos la vida en buscar otro restaurante, y ha sido todo un acierto. La comida muy cuidada, el lugar increíble, en la misma arena. Con música Chill out, y un ambiente muy romántico, con velas en la mesa, y posibilidad de tomarte un copa tranquilamente.

No es el país más económico de Asia para volar, pero si buscas con antelación, puedes coger los billetes por algo más de 600 €, que no está nada mal.

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La moneda oficial en Sri Lanka es la Rupia de Sri Lanka. Mil Rupias equivalen más o menos a 5 €.

El idioma oficial en Sri Lanka es el l cingalés y el tamil . Sin embargo existe un importante segmento de la población que habla Inglés, sobre todo las personas que trabajan en el sector turístico, y en la Capital.