Como ir de Isfahan a Yazd
Día 6 del Viaje a Irán: De Isfahan a Yazd
Yazd: Torre del Reloj, Mezquita Hazireh, Complejo Amir Chaqmaq, Museo del Agua, Mezquita Amir Chaqmaq, Ahebal Zaman Zurkhaneh
Hoy iremos de Isfahan a Yazd. Hemos leído que hay bastantes autobuses que recorren estas dos ciudades. Y uno de ellos sale a las 8:30 de la mañana. Por lo que después del desayuno y el correspondiente check out, pillamos un taxi y nos vamos a la estación de Kaveh. Esta es la terminal de la que salen los buses Vip a Yazd. Se ve mucha más gente por las calles, que los días anteriores. Se supone que hoy terminaron las fiestas. Tenemos ganas de comenzar a ver las ciudades en su estado natural, sin festivos, ni turistas iraníes. Llegamos a la terminal antes de las 8. Vamos a sacar el billete y nos dicen que el autobús de las 8:30 está lleno. El siguiente bus sale a las 10 de la mañana. Por lo que retrasamos nuestra partida a Yazd. Una vez más tenemos que alterar los planes que teníamos. Pero nos estamos dando cuenta, que Irán es un país complicado para hacer planes fijos. Los billetes nos cuestan 1.000.000 riales por persona. Nos sentamos en la sala de espera a que llegue nuestro autobús.
Pensamos que, con este precio, el autobús iba a ser el normal, no el VIP Bus. A las 9:55 todavía no ha llegado el bus y estamos muy pocos esperando el bus. Un poco más tarde de las 10:00 llega el bus al andén y vemos que es VIP bus. Viajar en buses de este tipo es un lujo. Muy espaciosos y muy cómodos.
Paramos en la estación de Isfaham del Sur de la ciudad. Con lo que el bus se puede coger en las dos estaciones. Nosotros pensábamos que solo se podía coger en la estación norte (Kaveh).
El trayecto se hace por un paisaje árido, que cada vez más, se va convirtiendo en desierto.
Después de casi 5 horas (algo más de lo que pensábamos), llegamos a la estación de autobuses, que se encuentra junto al aeropuerto. Es decir, a las afueras de Yazd. Hay algunos taxis esperando. Se nos ofrece uno, y le indicamos el hotel donde queremos ir. Nos dice que el precio son 400.000 riales, y nos parece bien (tampoco vamos a regatear por céntimos). Según vamos de camino al hotel, el taxista nos dice que el hotel al que vamos no tiene baño en la habitación y que no está muy bien. Le preguntamos si conoce alguno y por supuesto que conoce. Tiene un amigo que tiene un hotel. Por mirar no pasa nada. Le llama para ver si tiene habitaciones. Y vamos a verlo. Según entramos hay un patio, que casi con eso, merece la pena quedarse en este hotel. La habitación nos gustó y nos quedamos. El hotel se llama Pars y nos cobran 25 euros por noche.
En Yadz conoceríamos la religión Zorastriana, descubriríamos una ciudad en medio del desierto, que ha sobrevivido mejorando sus vidas con grandes obras arquitectónicas y uno de los lugares, para nosotros, más bonitos del Irán.
Torre del Reloj
Son las 3 de la tarde. Tenemos que aprovechar el resto del día para ver alguna cosa. Tenemos muchas ganas de conocer esta ciudad del desierto. Salimos del hotel y no sabemos por dónde comenzar. Cogemos la calle que va a dar a la torre del reloj. Digamos, que aquí puede empezar esta fascinante ciudad. Según llegamos a la Torre del Reloj, sabemos que esta ciudad nos va a sorprender. Vamos viendo las torres de ventilación de la ciudad por todos los lados.
Mezquita Hazireh
Y justo enfrente de la torre del reloj, a lo lejos se puede ver la Mezquita Jameh. Pero no la vamos a visitar de momento. Seguimos rectos y nos encontramos una hermosa Mezquita llamada Hazireh.
Entramos en la mezquita y hay gente orando. No nos perdemos ni una mezquita, ya de estar aquí, tenemos que aprovechar.
A escasos metros, pero al otro lado de la calle, se nos aparece otra Mezquita. Se entra por un pasadizo, donde podrás contemplar este edificio en su totalidad. Todavía no hemos visitado ningún monumento relevante de esta ciudad y ya nos está enamorando.
Más adelante, a unos 100 metros de la anterior mezquita, encontramos una agencia de viajes. Tenemos que sacar los billetes de autobús de Yazd a Shiraz. No queremos que nos pase lo mismo que nos pasó cuando vinimos a Yazd, que el autobús que queríamos estaba lleno, y tuvimos que esperar al siguiente. Íbamos a coger el de las 8:30 y al final tuvimos que ir en el de las 10:00 horas. Nos costó 1.500.000 de rupias cada uno. No nos pareció que hubiera mucha diferencia de precio como si lo compras en la propia terminal y te aseguras el trayecto.
Y aprovechamos para resolver la última parte de nuestro viaje. Habíamos leído que había muchas agencias de viajes en Irán, pero nosotros no habíamos visto ninguna. Puede ser que estuvieran cerradas los anteriores días por las festividades de esos días. Y después de cambiar varias veces el último trayecto del viaje. Decidimos comprar un billete de avión a Mashhad, después de visitar Shiraz. Y luego volar desde Mashhad a Tabriz. Nos pareció la mejor opción. Así que compramos estos dos billetes de avión en esta agencia. El primer vuelo Shiraz – Mashhad nos cuesta 12.700.000 riales (sobre unos 42€). Y el avión de Mashhad – Tabriz 14.500.000 riales (algo menos de 50€).
Seguimos por la misma calle, viendo alguna mezquita más y disfrutando de esta ciudad que tanto nos está gustando. Vemos un señor muy mayor que está sentado en el suelo y tiene en una sábana monedas, billetes y piedras raras. Nosotros coleccionamos monedas de los países a los que visitamos y nos agachamos a ver que tiene el señor. El hombre me pone en mi mano unas cuantas monedas y nos enseña un billete de 100.000 riales, que es lo que nos pide por las monedas. Aunque el señor no habla nada de inglés, nos entendemos perfectamente. Nos entendemos mejor que con algunos taxistas. Al final compramos unas cuantas monedas y unos billetes y le dimos 500.000 riales. El señor contento y nosotros también. Se forma alrededor de nosotros un corro de gente, interesados en lo que estamos comprando. Y viendo el buen ambiente que había, aprovechamos a sacar algunas fotos a la gente que estaba allí.
Museo del agua de Yazd
Llegamos a la esquina del complejo Amir Chaqmaq y al dar vuelta a la esquina se encuentra el Museo del Agua. Entramos a visitarlo con una tarifa estándar de 1.000.000 riales por persona. El precio que cuesta todas las entradas turísticas. En un principio visitamos este museo sin ninguna expectativa. Pero nos pareció muy interesante. Además, un chico que trabajaba allí, hablaba un poco de español y nos hizo de guía por todo el museo. Incluso abriéndonos estancias que se encontraban cerradas.
El agua es un bien muy preciado en el desierto, donde se encuentra la ciudad de Yazd. Su escasez ha hecho que sus habitantes hayan tenido que inventar sistemas para conseguir este bien. El museo explica la evolución que tuvo esta región. Ahora mismo, el agua, viene por tuberías subterráneas de la ciudad de Isfaham. Pero antiguamente era traída por sistemas subterráneos desde las montañas más próximas a Yazd. Los aguadores hacían un increíble trabajo picando los conductos. Nos explica el guía, que iban vestidos de blanco, por tres razones. Por ser un color puro para el islam y si morían, lo harían con el color de su religión. Por ser el color que mejor se ve en la oscuridad de los túneles. Y por ser un color limpio.
También se puede ver en el museo, como llegaba el agua a las viviendas, como se distribuía por medio de un reloj de agua y como se mantenía fresca. Nos explica todas las estancias de la casa. Nos dice que el español que sabe, lo aprendió viendo películas y hablando con turistas. Nos explica que en las puertas de las casas hay dos picaportes. Uno es usado por los hombres, que suena más fuerte y su tono es más grave y el otro para las mujeres con un tono más suave.
Nos pareció una visita muy interesante, para comenzar a conocer esta fascinante ciudad en medio del desierto.
Complejo Amir Chaqmaq
Cruzamos la carretera para ver el complejo Amir Chaqmaq, que nos parece precioso. Un edificio con una simetría arquitectónica de tres plantas, típica de Irán deslumbrante. Es una de las estructuras más grandes de Irán y data del Siglo XV.
Mezquita de Amir Chaqmaq
Hacemos tiempo en esta plaza visitando también la Mezquita de Amir Chaqmaq, que aunque no sea muy deslumbrante ayuda a completar la estampa de la plaza.
Gimnasio tradicional Ahebal Zaman Zurkhaneh
Con todo ello damos tiempo a que sean las 9:30 para ir a ver la exhibición del método de entrenamiento y la práctica de un deporte tradicional Iraní. Se trata del Ahebal Zaman Zurkhaneh. Esto se puede ver enfrente de la Mezquita de Amir, donde sobresalen cuatro conductos de ventilación. Hay dos pases, uno a las 17:30 y el otro a las 19:30, el precio de la entrada es de 1.000.000 de riales por persona y dura más de una hora.
Llegamos los primeros y poco a poco empieza a venir gente, es como un foso redondo a donde bajan los deportistas a hacer su entrenamiento. Hay una persona que va cantando y tocando un timbal y los deportistas van haciendo sus ejercicios al son de la música.
Se van turnando en el círculo central cobrando protagonismo cada uno de ellos según el entrenamiento que hagan. La primera media hora se la pasan haciendo flexiones, alternándolas con algunos bailes.
Llega el momento que todos estamos esperando, que es cuando cogen una especie de mazas y van haciéndolas girar alternativamente con sus brazos. Las mazas pueden ser de 3, 5 e incluso más kilos.
Terminan con unos ejercicios que consisten en girar muy deprisa sobre sí mismos. Este espectáculo es una mezcla de deporte y religión.
Salimos y la plaza Amir nos sorprende con una iluminación nocturna muy vistosa. Con esta imagen completamos este maravilloso primer día en Yazd.
Damos por finalizado el día cenando en nuestro hotel un Kebak de carne y un pescado con arroz.
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