Que ver y que hacer en el Lago Mývatn y alrededores
Día 7 del Viaje a Islandia: Cañón Stuðlagil, Cascada Dettifoss y Selfoss, Cráter Krafla y Viti, Fumarolas Hverir, Cueva Grjótagjá, Lago Myvatn
Después de una noche de mucho viento. Parecía que nos iba a volcar la furgoneta o caer un árbol. Nos levantamos y comenzamos el día. A pocos kilómetros de Seydisfjödur, vemos algo de nieve a los lados de la carretera. El día anterior, cuando llegamos, solo había nieve en las cumbres. Por lo que sospechamos que esta noche ha tenido que nevar. Hoy nos metemos en el interior de Islandia. Y al fondo, se ven unas montañas, con bastante nieve. Intuimos que hoy vamos a pasar frío.
En hora y media llegamos al Cañón de Stuðlagil. Este Cañón se puede visitar por las dos partes. Por la parte de la carretera hay un mirador y lo podrás observar desde arriba.
Y por la parte izquierda (según se llega), se puede visitar y acceder a la parte de abajo del Cañón. Si haces esto, que es lo que hicimos nosotros, hay un parking en el puente antes de llegar a la granja Klaustursel. Desde aquí, empezarás un trekking de unos 5 kilómetros, que te llevará unos 50 minutos y otros tanto de vuelta, por un camino, que no tiene perdida, entre extensas llanuras verdes, llenas de ovejitas.
Nosotros recomendamos hacer esta ruta, y bajar hasta abajo. Lo vas a disfrutar mejor, aunque solo, si tienes tiempo y ganas de andar un rato.
A mitad de camino, encontrarás una cascada, para amenizar el trayecto. Aquí, las cascadas las regalan con todo.
Este Cañón tiene una de las colecciones de columnas de basalto más grandes de Islandia. El cañón tiene 500 m de largo y columnas de basalto de 20-30 metros a ambos lados del río.
El color del río varía según las estaciones, desde azul verdoso durante el verano hasta gris marrón cuando la presa de Karahnjukar está en estado de desbordamiento y cuando la nieve se derrite en el río. Por eso, hay tanta variedad de colores en las fotografías que ves en Internet.
De esta parte del río, no suele haber mucha gente visitando el Cañón. La gente suele ir por la otra parte, que es donde están los miradores, y no hay que andar nada, para verlo. Pero, nosotros podemos bajar a ver el cañón desde abajo. Que es donde se puede apreciar las columnas mejor, y donde se aprecia la fuerza del río. Tienes que tener cuidado para bajar hasta abajo, ya que no hay escaleras y las rocas están húmedas y resbalan bastante.
A una hora y media (hoy los trayectos son largos, pero se hacen muy amenos), llegamos a una de las cascadas más importantes de Islandia. Este trayecto, nos brindó paisajes increíbles. La nieve reciente, que cubría tímidamente las montañas, creaban un escenario fabuloso. Aunque, algunos tramos de la carretera, estaban con algo de nieve y hielo.
A lo lejos, ya vemos el agua en suspensión desde la carretera. Esto, nos advierte de las dimensiones de la Cascada. En realidad, son dos Cascadas, Dettifoss Y Selfoss. Un lugar muy turístico en Islandia. El parking estaba completamente lleno.
Para llegar a ellas hay dos caminos. El primer camino, te llevará a Dettifoss. Una cascada que te dejará con la boca abierta. No pensábamos que, después de ver tan increíbles cascadas en Islandia, hubiera alguna, que nos dejará tan impactados.
Se encuentra a casi un Kilómetro de la entrada, pero se la puede oír desde el parking.
Una cascada muy ancha, con un caudal de agua enorme. De los lugares que te dejan impactados y te marcan el viaje. Es uno de los sitios que hay que visitar en Islandia.
Hay varios miradores, para poder observarla bien. Todos ellos, son recomendados. Incluso el sol, nos brindó un bello arco iris.
Desde aquí, por un camino siguiendo el río, podrás ver la Cascada Selfoss. Una bonita Cascada, que a nosotros nos impresionó menos que su compañera Dettifoss.
Salimos exhaustos, y nos dirigimos al cráter Leirhnjúkur. El paisaje, está tremendo de bonito. Todo nevado. Pero hace un frio exagerado. No habíamos pasado tanto frío en el viaje, como hoy.
En un pequeño paseo, nos encontramos con el Cráter. Con un color azul turquesa, y las montañas de fondo espectacular. El día de hoy, nos está encantando.
Visitamos el Cráter Vity. Uno de los muchos que hay en el inmenso volcán Krafla de 10 kilómetros de diámetro. Vity es un enorme cráter, el segundo más grande de Islandia, con una laguna verde en su interior. Puedes rodear el cráter andando para tener distintas perspectivas de la laguna y sus alrededores. Vity significa en islandés infierno, ya que antiguamente se pensaba que el infierno se encontraba bajo los volcanes.
El paisaje que podemos contemplar en el recinto del Volcán Krafla es impresionante. Paisajes rodeados de montañas nevadas. Paisajes volcánicos, con terrenos llenos de fumarolas.
Junto a todo este complejo de Volcanes y cráter, se encuentra una planta eléctrica de geotermia. Islandia aprovecha mucho los recursos naturales, para producir electricidad. Es considerada, la central eléctrica más grande de Islandia.
Y de aquí nos vamos a las Fumarolas Hverir. El humo que desprenden, se ve desde la carretera, por eso no te costará encontrarlas. Bajamos del coche, y el olor a azufre (huevo podrido), inunda todo el ambiente. Algunas de las fumarolas, dejan un humo tan espeso, que te hace imposible ver nada.
Hverir Námaskard es una de las zonas con fumarolas, lodo hirviendo, pequeños cráteres y geysers más conocidos del norte de Islandia. Hverir es el campo de aguas termales que está debajo de la montaña Námafjall. La zona se caracteriza por esta variedad de fuentes termales diferentes, piscinas de barro hirviendo y ollas de barro, así como fumarolas. En esta zona admiraras las maravillas y rarezas que la tierra nos ofrece.
Para despedir el día, pasamos por la Cueva Grjótagjá. Esta cueva tiene un baño termal en su interior (pero está prohibido bañarse). Es famosa por el rodaje de Juego de Tronos. Aquí fue donde Jon Nieve e Ygritte rodaron una escena romántica. La cueva no nos pareció nada interesante. Pero nos pilla de camino y aprovechamos a verla.
Nos vamos a nuestro Camping de hoy. Se encuentra en el Lago Myvatn. El Camping se encuentra a los pies del Lago, con unas bonitas vistas. Tiene baños y ducha gratis. También tiene una pequeña cabaña para cocinar. Cuesta 2000 Coronas por persona. Lo habitual en los Camping que nos hemos alojado.
Importante: Por la noche, hacemos el pago para pasar por el túnel de Vadlaheidargong. Cuesta 1500 Coronas.
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