TULUM: Tercer día en el Paríso
Buceo en Cenote Dos Ojos
Por supuesto que nos volvemos a levantar para ver la salida del sol, y pasear por estas playas desiertas.
Disfrutamos mucho de la playa, pero sobre todo a primera hora se respira un ambiente de tranquilidad.
Hoy toca buceo en Cenotes. No es algo que nos atraiga mucho bucear dentro de una cueva, pero ya de estar en México, había que aprovechar la ocasión.
Consideramos que es más peligroso que hacerlo en el Mar abierto, ya que entras en cuevas, donde puedes perderte, aunque vas con un guía o puedes agotar el aire de la bombona sin posibilidad de salir. Antes de hacer una inmersión en un cenote, debes hacer un buceo en el mar para que la empresa te vea como te desenvuelves buceando y te da el visto bueno para poder bucear en un Cenote.
Lo hacemos en el Cenote Dos Ojos, cerca de Tulum.
La entrada del Cenote es espectacular, con su agua turquesa.
Cuando empiezas a sumergirte, ves como los rayos de sol penetran en la cueva. Lo más bonito de la inmersión, ya que luego está todo completamente oscuro.
Hacemos dos inmersiones con traje largo y grueso por el frío del agua dentro de la cueva. Una experiencia que sin estar mal, yo tampoco la repetiría. (130 $). Es una sensación de claustrofobia estar encerrado en una cueva llena de agua, prefiero el mar para bucear. Aunque no hagas buceo, es una visita obligada ir a un Cenote. La península del Yucatán, cuenta con numerosos cenotes, y bañarse en sus aguas frescas y cristalinas es todo un placer. La Civilización Maya los consideraba como un elemento sagrado, donde practicaban rituales y ceremonias religiosas.
Por la tarde volvemos a alquilar unas bicicletas y nos damos una vuelta por la costa.
Paramos en playas absolutamente desiertas, y es lo bueno que tiene este lugar.
Y cuando te canses, te paras a tomar una cerveza Sol o Coronita, que son las únicas que hay por esta zona.
Y entre buceo y playa se nos pasan nuestros primeros tres días en México. Ya con ganas de hacer otras cosas y movernos un poco más. Consideramos que con tres días para disfrutar de las playa son suficientes, y es lo que solemos hacer en todos los sitios.
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