Estamos a una hora de Jinhu. Es todo una bajada de escaleras en mal estado, donde las piernas cada vez, más flojean. Llegamos con la lengua fuera a Jinhu y eso que esta etapa es corta, y no muy dura, pero arrastramos el esfuerzo el día anterior. En el medio del pueblo hay un hotel en el que entramos a ver la habitación. Nos cobra 900R por la habitación con baño privado. Los hoteles aquí son algo mejor, lógicamente, que los de más arriba.

Dejamos  las mochilas, cogemos el bañador y vamos directamente a por nuestra recompensa. A recuperar fuerzas en las aguas termales. Pero para llegar a ellas, debes bajar unos 20 minutos más de escaleras.

Vamos a odiar las escaleras, pero por lo menos esta vez, tenemos un premio abajo. Y son las famosas Hot Spring de Jinhu. Que mejor terminación del trekking que unas aguas termales. La entrada cuesta 100R. Se encuentran junto al río. Un río con una fuerza del agua impresionante.

Hay cambiadores para ponerte el bañador. Las aguas tienen 3 pequeñas piscinas de agua caliente. La más caliente es la del fondo. Tienen hasta ducha para ducharte antes de meterte en la piscina. Y cuál fue nuestra sorpresa que también era de agua caliente.

Estuvimos hora y media en el agua. Salimos arrugados como una pasa. Y porque empieza a llover un poco y tenemos miedo de que caiga como todos los días la tormenta. Subimos a nuestro hotel en otros 20 minutos. Y cuando llegamos empieza a llover con fuerza. Otra vez más hemos tenido suerte. Aunque la suerte también hay que buscarla. Y si no hubiéramos madrugado, nos hubiera pillado la tormenta. No solemos protestar de los hoteles, pero este está siendo un desastre. Llamamos al chico, porque los enchufes de la habitación no funcionan. Nos dice que no, que lo que tengamos que cargar, lo hagamos en el comedor. No tenemos agua en la ducha, nos dice que lo va a mirar. Le decimos que nos cambie de habitación y dice que no. Y la manta que le hemos pedido cuando llegamos, se la volvemos a pedir, y no nos hace caso. Y con la lluvia ha refrescado bastante. Le volvemos a pedir la manta, y nos dice que nos la dará más tarde. Más tarde le volvemos a preguntar por el agua y no nos hace ni caso, está jugando a las cartas. Miramos los enchufes en el comedor y tampoco funcionan. Se lo decimos y ni caso. Así que le decimos que nos marchamos. Es la primera vez que hacemos algo así. El chico ni se inmutó. El hotel creemos que se llama Hot Spring. Aunque sigue lloviendo, cogemos las cosas y vamos a buscar otro hotel. Seguimos bajando y preguntamos en un par de hoteles, por habitación con baño privado. No tienen, pero en el último, nos dicen que en el siguiente sí que tienen. Paramos y preguntamos y nos enseña la habitación y nos dice que 1000R. Un poco más que el anterior, pero también está mucho mejor. El hotel se llama Namaste. Y es el último del pueblo. Nos gustó bastante el Hotel Namaste.

Todos los hoteles en la zona del trekking son muy similares. Pero este está bastante bien. El comedor está decorado con cosas de la zona, cosas antiguas. Y el personal es muy atento.

Cenamos un burrito de vegetales con queso, y una hamburguesa con patatas y ensalada. Necesitábamos ya algo de carne. Las dos cosas estaban muy bien cocinadas. Y así terminamos el día, pensando en acabar ya, al día siguiente el trekking y seguir con el viaje.