PHNOM PENH – BATTAMBANG
Viendo los primeros templos en Battambang en la puesta de sol
Battambang se encuentra a unos 300 Kilómetros de la Capital. Previamente el día antes habíamos comprado el billete de autobús en una agencia cerca de nuestro hotel. Moverse por Camboya es bastante fácil, ya que los billetes de bus los puedes comprar tanto en agencias que hay por toda la ciudad o incluso en los hoteles. Nosotros en nuestro hotel no preguntamos, pero por lo que vimos luego, seguramente también te los vendían. Así que por la mañana temprano nos viene a buscar un tuk tuk para llevarnos a la estación de autobuses. También el tuk tuk te entra con el precio de los billetes de bus. Y en unas seis horas llegamos a Battambang.
El bus no entró en la ciudad, se quedó a las afueras. Solo bajamos nosotros, y había esperando muchos conductores de tuk tuk, así que según pusimos el pie en tierra, todos se abalanzaron para vender sus servicios. La verdad que fue un poco agobiante, casi no te dejaban ni coger el equipaje. Al final un chico que notamos que hablaba bastante bien inglés, le indicamos que nos llevara. Cuando llegamos al hotel nos ofrece llevarnos al día siguiente a conocer los alrededores de la ciudad. Nos pareció bien el precio sobre unos 20 $, y quedamos con él para el día siguiente.
Nos quedamos en el Hotel King Fy Hotel, que nos sorprendió gratamente. Es un hotel moderno, pero con las habitaciones decoradas muy del estilo angkoriano.
Nos gustó mucho, con piscina, desayuno incluido (muy bueno), y con un balcón con buenas vistas.
Vistas desde el balcón de nuestra habitación
Battambang es una ciudad poco turística, en nuestro hotel la gente que estaban hospedados, era gente que estaba allí por trabajo, gente de negocios, pero no de turismo.
Battambang es la segunda ciudad más grande de Camboya y la capital de la provincia de Battambang, que fue fundada en el siglo XI. Es la antigua capital de Monton Kmer y se encuentra en el corazón del noroeste de Camboya. Hasta los años de la guerra, en los que casi todas las infraestructuras fueron destruidas, era la principal provincia productora de arroz del país.
Nos vamos directamente a la piscina a refrescarnos un poco del calor del viaje. Y por la tarde nos fuimos a ver un poco la ciudad.
Cogimos el paseo junto al río, que a esas horas estaba muy animado. Mucha gente bailando, haciendo ejercicio. Llegamos a un templo llamado Sangke Pagoda.
La entrada al templo es una imitación a varios motivos de templos de Angkor. La puerta tiene una estructura similar a la puerta Victoria de Angkor, que han introducido en ella la terraza de los elefantes. Según pasas la entrada, encuentras los guardianes, sujetando una enorme “naga” o serpiente, también copiada de varios templos Angkorianos.
El sol se estaba poniendo y mientras estábamos visitándolo salieron unos monjes a tocar un tambor, para llamar a la oración. La verdad que todo fue muy Zen, se respiraba mucha espiritualidad. Además a esa hora que el sol ya se está escondiendo es la mejor hora para sacar fotografías.
A pesar de ser una gran ciudad, conserva un estilo de vida tranquilo. Una relajante ciudad al borde de un río, con sus calles tranquilas. Quizás Battambang no es un lugar para ver, sino un lugar para simplemente ser.
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