Cómo ir de Hué a Hoi An
Día 7 del Viaje a Vietnam: Visitar la Ciudad Imperial de Hué y llegar hasta Hoi An
Hoy terminaríamos de ver la ciudad de Hué. Nos quedó muy poco por ver el día antes, pero todo en un día es muy complicado. Si quieres saber más de lo que ver en Hué, pincha aquí.
Prácticamente, lo único que nos falta por ver de Hué es la Ciudad Imperial. Por lo que tenemos toda la mañana. Exactamente, tenemos hasta las 13:30 horas que tenemos un bus que nos llevará a Hoi An. Así que, nos lo vamos a tomar con calma hoy por la mañana.
Nos vamos hasta la Ciudadela andando tranquilamente, que siempre encontramos cosas interesantes. Situaciones, que no las vas a vivir, si vas en un taxi.
Cuando vamos a pasar por el puente Truong Tien, oímos unos cánticos. Y vemos alrededor de una especie de monumento, mucha gente a su alrededor. Es una ceremonia Budista, que parece hasta importante. Y ya, nos liamos un rato, viéndolo.
Llegamos a la Ciudadela a las 8:00 horas, que es la hora cuando abre sus puertas. Según llegamos, como si salieran a recibirnos, una especie de guardia real que están en las puertas de la Ciudadela, tocando unos instrumentos.
Esta Ciudadela, puede ser la atracción imprescindible e importante de Hué. Y no es más que una fortaleza amurallada, de la dinastía Nguyen, desde 1805 hasta 1945. Esta grandiosa obra de arquitectura fue construida en 1803 por el fundador de la dinastía Nguyen. Y para su construcción, se necesitaron más miles de trabajadores y ha sido declarado Patrimonio de la Unesco en 1993.
La forma de la Ciudadela es un cuadrado dividido en tres partes. Una gran Muralla protege esta ciudad, con un foso a su alrededor.
Durante la Guerra de Vietnam, muchos de sus edificios, sufrieron daños, por los bombardeos. Algunos de ellos se han restaurado. Incluso, vimos un par de ellos, que parecían bastante importantes, que estaban en rehabilitación.
Dentro de la Ciudadela hay estancias donde vivía el Emperador, varios templos y otras estancias. El recinto es enorme. Pensábamos que nos iba a llevar menos tiempo, pero estuvimos más de tres horas. Aunque tenemos que decir, que lo tomamos con calma.
En algún pabellón, encontrarás grupos de señoras tocando instrumentos tradicionales de Vietnam, que te amenizarán tus descansos.
También, encontrarás el Jardín Real, donde hay una gran variedad de árboles. Aunque, en todo el recinto, puedes ver Bonsáis, que nos parecen preciosos.
Así, terminamos casi la mañana. Nos da tiempo a volver al Hotel La Perle, haciendo una parada antes, para comer.En esta ocasión probamos la Sopa Bun Bo Hue, típica de la Ciudad de Hué y Bun Thit Nuong, acompañado con unos rollitos (que no nos falten).
Según terminamos la comida, vamos a recoger nuestro equipaje, que lo tenemos en el Hotel La Perle. Y vamos a coger el autobús que nos llevará a Hoi An. Hemos comprado el billete unos días antes por internet en la web de Bookaway. Es muy fácil, eliges tu trayecto, tu horario y al terminar, te indican el lugar donde te recogen y donde te dejan. Y el día anterior, te envían un Whatsapp para que confirmes y recuerdes el viaje.
La parada donde nos recoge el bus, se encuentra muy cerca del Hotel La Perle. En tres minutos estamos esperando el bus. Puntual, aparece el bus que en dos horas nos llevará hasta Hoi An. No hay muchos kilómetros, pero en estas carreteras, los kilómetros se demoran mucho. A mitad de camino, te hacen una parada, en una zona con una playita pequeñita.
El conductor de nuestro autobús, no conduce nada bien. Hace un par de frenazos, que casi nos tira a todos de nuestros asientos. Y todo el camino, vamos dando botes y agarrados al asiento. Ya en Hoi An, nos deja un poco lejos del centro. Cogemos un Grab que por 50.000 VND nos lleva a nuestro Hotel Pho Cho Dem. Cuando llegamos al hotel, la chica nos informa un poco de la ciudad, de lo que se puede hacer, nos da consejos de tours, de donde comer, etc. Una chica muy agradable. Y la habitación del Hotel Pho Cho Dem increíble. El mejor hotel que hemos tenido en Vietnam. Un hotel con mucho encanto, habitación amplia. Nuestra habitación da a una pequeña piscina, que viene muy bien, para sofocar el insoportable calor.
Después de un baño en la piscina, salimos a dar una vuelta y a cenar. Hay muchísima gente por todos los lados. Nos damos cuenta, de lo turístico que es Hoi An, además de que hoy es sábado y puede que haya mucho turismo nacional.
El mercado nocturno se encuentra en la orilla del río. Pensamos que nos sería difícil encontrarlo. Pero nada más salir del Hotel las luces del Night Market se veían desde todo Hoi An. No tiene pérdida. Toda la avenida, está muy iluminada, llena de farolillos típicos de la ciudad. Y es que, cuando cae la noche, la ciudad se ilumina por estos farolillos tradicionales vietnamitas.
El río, se llena de barcas, con turistas, también iluminados por farolillos. Incluso venden unas velas, para ser depositadas en el río como ofrendas. Todo muy romántico, pero lleno de muchísima gente.
Hay innumerables puestos de souvenirs por toda la avenida. Hay pequeños puestos de farolillos, donde te puedes hacer una foto, pagando 10.000VND. Esos puestos ganan más de las fotos, que de la venta de dichos farolillos.
Por el otro lado del río, la avenida, está repleta de restaurantes o sitios para cenar. Nos sentamos en uno de ellos, justo al lado del río, donde veíamos el espectáculo de las barcas iluminadas.
En la cena probamos la ensalada de papaya y un arroz frito con pato. Para no perder la costumbre, unos rollitos vietnamitas, para picotear.
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