PARACAS – NAZCA: Islas Ballestas

Sobrevolando en avioneta privada las líneas Nazca.

Hoy va a ser un día muy largo. Terminaremos de ver Paracas, luego nos desplazaremos a Nazca y por la noche cogeremos un bus nocturno que nos llevará a Arequipa. Así que a las 8:00 h. teníamos el Tour a las Islas Ballestas (30 soles). Dura unas 2 horas. Junto con la Reserva Nacional de Paracas son las dos excursiones más solicitadas en Paracas. Lo hicimos todo con el Hotel y nos cobró 45 soles, más 15 soles por entrada al parque. Vas a ver una enorme variedad de aves, lobos marinos y el famoso Candelabro, un enigmático geoglifo de unos 2500 años de antigüedad, que incluso hoy en día se desconoce quién lo realizó y con qué fin. Es uno de los misterios de Perú.

Nada más salir del puerto con la barca, empezamos a ver delfines.

Te llevan en una barca para ver pequeñas islas que están llenas de aves como cormoranes, piqueros, pelicanos, gaviotas, y zarcillos.

Pero lo que más nos sorprendió fue ver el pingüino de Humboldt.

Aunque también ver los lobos marinos, al ser animales que no estás acostumbrado a ver, te sorprenden.

Booking.com

Estas islas son lo más parecido que hay a Islas Galápagos, con una increíble y gran cantidad de fauna.

También podrás ver uno de los más grandes vestigios del ingenio de las poblaciones ancestrales del Perú: El Candelabro de Paracas. Este geoglifo es una imagen de tamaño colosal dibujada sobre la cambiante superficie de arena de la Reserva Nacional de Paracas y que hoy ha sido reconocido como Patrimonio Cultural de la Nación. Es un enorme geoglifo con una extensión de 170 metros y una profundidad promedio de 1.2 metros. Se cree que tiene relación con las líneas y geoglífos de Nazca, y al igual que estos se desconoce su origen.

A las 10:00 h. acabamos con el tour y rápidamente vamos a por la mochila al hotel para coger un bus a las 10:30 que nos lleve a Nazca (35 soles).  Salimos de Paracas como entramos, corriendo. Pero si queremos ver todo lo que tenemos en mente, es la única manera de hacerlo.

Ahora nuestra intención es ver las líneas Nazca esa misma tarde. Aunque dicen que se ven mejor por la mañana, no queremos perder un día. Y queremos marchar esa misma noche.

Poco antes de llegar a Nazca, el paisaje se vuelve aún más sorprendente. El árido, cambia de color, a un marrón muy oscuro, y unas formaciones montañosas extrañas.

Llegamos sobre las 3 de la tarde, sabemos que vamos a andar muy justos. Intentamos ver las líneas y si no es posible marcharnos sin verlas y no esperar al día siguiente. Hay un hombre en la estación de bus que nos dice que nos lo puede arreglar. Después de muchas llamadas nos dice que solo hay una posibilidad para verlas ese día. Es cogiendo una avioneta privada para nosotros dos. Es normal ya que a esas horas ya no hay gente. Nos lo deja a 100 dólares cada uno. De la otra forma serían 60-70 dólares y hay que esperar hasta el día siguiente. Es mucho dinero, pero si no queremos quedarnos con las ganas de verlas, no tenemos más remedio que aceptar. Y aceptamos. Nos lleva a un Hostel para que dejáramos las mochilas. Nos lleva al aeropuerto y nos está esperando una avioneta para nosotros dos. Piloto, Copiloto y detrás nosotros dos.

Arrancamos el vuelo, y la avioneta es tan pequeña que da una sensación de inseguridad. Parece que vas montado en una atracción de feria. Empezamos a ver las líneas, y en cada una de ellas para que podamos verlas mejor, vuela en circulos, que te da tal mareo que te cuesta hasta hacer fotografías.

Incluso nos parece más bonito el paisaje al otro lado de las montañas que las propias líneas.

Aquí se puede apreciar el tamaño de las líneas, ya que las puedes comparar con un autobús.

Llega un momento que solo quieres que eso termine ya. Así que no sabemos si recomendarlo o no. Porque realmente es bastante caro, y aunque las líneas Nazca son algo que forman parte de la cultura y el misterio de los primeros pobladores de Perú, pero el verlas tampoco es algo impresionante. Si te apetece dar un paseo en avioneta, es una buena excusa para verlas, sino piénsatelo. Y menos si no tienes donde encajarlo en tu viaje.

Este es el pueblo de Nazca rodeado de unas montañas, que parecen un paisaje de otro planeta.

Terminamos y ya están cerrando el aeropuerto, ya que solo se utiliza para ver las líneas Nazca. Salimos y en el parking hay dos vehículos que no es ninguno del hombre que nos trajo. ? ¿Donde está?. Sobre todo porque hemos dejado las mochilas en el hostel donde nos llevó, y no sabemos cual es. La verdad que hemos pecado un poco de ingenuos. No se si ha sido por la prisa por ver las líneas o por el ajetreo del día, pero hemos cometido un error. Al cabo de 10 minutos aparece un hombre con un vehículo y nos dice que nos viene a recoger, y que viene de parte de la persona que nos llevó. Que alivio. Nos lleva a recoger nuestro equipaje, y todo queda en un sustillo.

Vamos a la estación de bus. Nuestro bus sale para Arequipa a las 21:30 h. y tarda unas 10 horas (90 soles). Aquí también tienes que facturar, y luego te meten el equipaje en el bus.

IMPORTANTE: Cuando carguen el equipaje al bus, te recomendamos que estés atento. Ya que nosotros vemos que nuestras mochilas no están. Cargan todas y cuando van a cerrar el maletero del bus le decimos al hombre que las nuestras no las han subido. Va a revisar en una caseta, y sale con ellas. Si hoy no hemos perdido el equipaje, no creo que lo perdamos nunca.